16 feb 2011

Moldeado para servir a Dios!!



Usted fue moldeado para servir a Dios.
Dios formó a cada criatura de este planeta con un área particular de especialidad. Algunos animales corren, algunos saltan, algunos nadan, algunos cavan y algunos vuelan. Cada uno tiene un papel en particular que jugar, basado en la manera en que fueron moldeados por Dios. Lo mismo es verdad de los humanos. Cada uno de nosotros fue diseñado especialmente, o "moldeado", para hacer ciertas cosas.
Antes de diseñar un nuevo edificio, los arquitectos primero se preguntan, "¿Cuál va a ser el propósito de este edificio? ¿Cómo va a ser usado?" La función propuesta siempre determina la forma del edificio. Antes de que Dios lo creara, El decidió qué papel quería que jugara en la tierra. El planeó exactamente cómo quería que usted lo sirviera y después lo moldeó para esas tareas. Usted es como es porque fue hecho para un ministerio específico.
La Biblia dice, "Somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para hacer buenas obras” (Efesios 2:10) La palabra poema viene de la palabra griega traducida como "hechura". Usted es una obra de arte manual de Dios. Usted no es un producto de una línea de producción, indiferentemente producido en masa. Usted es una obra maestra original, única y hecha a la medida.
Deliberadamente, Dios lo moldeó y lo formó para que usted lo sirva de una forma que hace que su ministerio sea único. Cuidadosamente El mezcló el coctel de ADN que lo creó.
David alabó a Dios por esta increíble atención personal a detalles: "Tú hiciste todas las partes internas y delicadas de mi cuerpo y las uniste en el vientre de mi madre.
Dios no sólo lo moldeó antes de su nacimiento, El planeó cada día de su vida para apoyar su proceso de moldeamiento. David continuó, "Cada día de mi vida fue anotado en tu libro. Cada momento fue preparado antes de que un sólo día ocurriera." Esto significa que nada de lo que pasa en su vida es insignificante. Dios usa todo para moldearlo para su ministerio a otros y para moldearlo para su servicio a El.
Dios nunca desperdicia nada. Él no le daría habilidades, intereses, talentos, dones, personalidad y experiencias en la vida si no tuviera intenciones de usarlos para Su gloria. Al identificar y entender estos factores, puede descubrir la voluntad de Dios para su vida.


Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras,
las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.
Efesios 2:10

0 comentarios: